Economía
2014, ¿recuperación económica?
El año 2014 es el año de la recuperación. Si cogemos las últimas portadas y/o comentarios del Gobierno o prensa, la conclusión que obtenemos es que la economía está empezando a mejorar, a reactivarse.
Yo, por el contrario, soy algo más pesimista (o realista, según lo queramos ver), y suelo ver con bastante escepticismo lo que la prensa nos intenta “vender” desde hace un tiempo.
Esto no quiere decir que poco a poco no vayamos “despegando” de este aeropuerto sin actividad en el que llevamos metidos unos 7 años aproximadamente, pero las cosas hay que verlas como son, con cierta perspectiva, sobre todo porque lo peor que podemos hacer ahora es relajarnos y creernos que todo el trabajo está hecho.
¿Por qué digo todo esto?
Voy a dar algunos motivos por los que, bajo mi punto de vista, opino que aún queda mucho trabajo por hacer y que no es oro todo lo que reluce, aunque todos pretendamos que brille cuanto antes…
A) Resultados bancarios
Llevamos muchos años sumidos en una crisis financiera sin precedentes, pero más concretamente, yo lo tildaría de una crisis bancaria sin precedentes.
La banca es el motor de la economía, nos guste o no, y para que una empresa crezca, funcione, o simplemente, no se ahogue financieramente, necesita crédito, el cual es suministrado por la banca.
Ahora bien, este crédito es prácticamente inexistente.
Dicho esto, ¿qué significan los últimos resultados positivos de la banca?
En estas primeras semanas del nuevo año hemos conocido los resultados de algunos de los principales bancos de este país.
El Banco Santander duplicó sus beneficios con respecto al ejercicio 2012, obteniendo unos 4.700 millones de euros de beneficio.
Bankia ha presentado unos resultados con unos beneficios superiores a los 800 millones de euros.
Popular, Caixabank…todos han presentado resultados bastante positivos.
Muchos os estaréis preguntando…si los bancos están dando beneficios, ¿por qué no fluye el crédito?
El crédito no fluye, principalmente por dos motivos:
1) Resultados extraordinarios
El negocio principal de un banco viene por el diferencial entre el tipo de interés al que prestan dinero, y el tipo de interés que ofrece por dejarle nosotros ese dinero. Tampoco hay que olvidar como fuente de negocio las comisiones que nos cargan, cada vez más elevadas…
¿Qué quiero decir con esto? Si nos fijamos y analizamos un poco más detenidamente estos resultados bancarios, vemos que no vienen por esto que he comentado como negocio principal, o core business, en la jerga financiera.
Estos grandes beneficios podrían explicarse, entre otras muchas cosas, por el descenso en la dotación de provisiones que tuvieron que contabilizar (obligados) en ejercicios anteriores, y que han sido menores en este último año, por lo que ese gasto ha sido menor (incrementándose el beneficio). Dichas provisiones son (para aquellos que no estén familiarizados con el concepto), un colchón financiero que los bancos dotan para hacer frente a cualquier imprevisto que pudiera surgir. (Deterioro de activos inmobiliarios, etc.).
Otro punto importante, relacionado con estos resultados extraordinarios, son las ventas de activos por parte de los bancos, con el fin de aligerar de sus balances el lastre inmobiliario que tienen y, de paso, obtener liquidez.
Me refiero a la venta de la gestora inmobiliaria del Banco Santander, Altamira, por 385 millones de euros. Me refiero también a la venta, por parte de Bankia, de Hábitat, por 90 millones de euros, etc.
2) Morosidad
El segundo punto importante por el que no fluye el crédito bancario es la morosidad (resulta de la división entre el total de crédito, y el crédito moroso).
Según el Banco de España, la banca cerró el 2013 con una morosidad del 13, 6%. Sin embargo, en esta morosidad no están incluidas las refinanciaciones (ya se sabe, “patada hacia delante” y esperar que esto remonte), ni tampoco todos los créditos morosos traspasados a SAREB. Si se tienen en cuenta, la cifra se elevaría hasta el 16%, según ElConfidencial.
Por tanto, cómo va a fluir el crédito, si cada vez los clientes morosos representan un mayor porcentaje sobre el total de créditos….Hasta que no cambie la tendencia, dudo que se reactive el crédito.
B) % de la deuda sobre el PIB
Otro punto que me preocupa y por el que no veo una recuperación económica clara, es la deuda que tiene España, si la comparamos con nuestro PIB.
Estamos sometidos a una gran presión fiscal, fomentada por las últimas subidas de impuestos, los cuales, en teoría, tienen el objetivo de reducir progresivamente esa deuda.
No obstante, los últimos datos son preocupantes, ya que la deuda española está próxima al 100% del PIB. Mi pregunta es, ¿dónde se está yendo todo el dinero recaudado?
Me temo que una buena parte está yendo a parar a las arcas de tanto Ayuntamiento (con sus respectivos coches oficiales y demás suplidos), Diputación, CCAA…y un largo etcétera, que hace que sea insostenible el sistema tal cual lo conocemos hoy, y que estamos ayudando a mantener gracias a nuestro esfuerzo diario.
Porque una cosa está clara, la mano no está metida donde debería estar metida…
Por tanto, banca y deuda son los principales protagonistas de toda esta historia. Se podría decir que ambos han sido los principales causantes de esta debacle financiera llamada crisis, pero, paradójicamente, también van a ser los salvadores.
No hay que olvidar que la banca es la que está comprando toda la deuda española (lo que también influye en que no se concentre en su core business), de manera que, a medida que el Estado consiga reducir dicha deuda, podrá ir liberando a la banca del lastre de tener que comprar, casi por obligación, ingentes cantidades de bonos soberanos.
A pesar de esta visión algo pesimista de la recuperación económica, también hay una pequeña ventana que se está abriendo, y que anticipa una posible recuperación económica, la Bolsa.
Los mercados financieros actúan como pitonisas en esto de la economía, anticipando recuperaciones (o depresiones), según corresponda. Cabe destacar que en los últimos meses, estamos viendo cómo el IBEX está intentando consolidar los 10.000, partiendo de la cota de los 8.000 hace apenas un año. Algo estamos mejorando.
El turismo mejora, las exportaciones mejoran, empiezan a realizarse transacciones corporativas (compra-ventas de empresas)… en fin, un cúmulo de circunstancias que, a pesar de todo lo anteriormente descrito, nos permita el lujo de pensar que poco a poco, demasiado quizás, estemos empezando a ver la luz al final del túnel…